

El Partido Justicialista debía renovar sus autoridades en mayo, pero en el arranque del año el Consejo Provincial presidido por el exgobernador Jorge Capitanich decidió aplazar para el 16 de noviembre las elecciones internas partidarias y prorrogar el mandato de todas las autoridades. Esto, en medio de las preciones de varios sectores internos que exigían autocrítica e internas tras la derrota de 2023.
Paralelamente Capitanich desestimó las elecciones internas para cargos electivos tanto para las legislativas provinciales y directamente digitó las listas que él mismo encabezó como candidato a diputado provincial en mayo, y como candidato a senador el pasado 26 de octubre; experiencia que terminó en sendas derrotas.
El plazo para la inscripción de candidatos a cargos partidarios venció el 14 de octubre, en plena recta final de la campaña hacia las elecciones nacionales, por lo que Capitanich, vía Junta Electoral, lo prorrogó hasta el 30.
De todos modos, la presentación de listas era una mera formalidad, ya que él mismo había adelantado que no habría comicios, ya que la integración del Consejo y el Congreso ya habían sido acordadas en el marco de las negociaciones por la “unidad del peronismo” entre el coquismo y otros sectores.
Justamente, en ese contexto, los corrillos aseguraban que había prometido la presidencia del Partido a varios dirigentes, en post de lograr respaldo para sus listas legislativas.
Finalmente, la discusión se zanjó de manera sencilla y previsible: Capitanich continuará presidiendo el Consejo Provincial, mientras su hija Guillermina ocupará la vicepresidencia primera, aparentemente, en representación de “la nueva generación de muy buenos dirigentes” descripta por su padre al hablar de sucesión.
Así, la hija del exgobernador desplaza a la intendente de Barranqueras: Magda Ayala, que aspiraba, de mínima, conservar el lugar después de haber demostrado respaldo electoral con su frente Primero Chaco, que ganó dos bancas, y haberse allanado a la “unidad” en las elecciones nacionales secundando a Capitanich como candidata a senadora, una fórmula que no impactó en su caudal electoral en su propio territorio.






