No hay 2 (derrotas) sin 3

El experimentado Capitanich perdió por segunda vez en 5 meses contra un debutante.

Por Darío Zarco |

El trigobernador Jorge Capitanich se presenta como el político más experimentado y capacitado habido y por haber, y récord en todo. Quizás esté en lo cierto, pero también es cierto que a la hora de la verdad su CV no le importa a nadie como a él.

Repasando: como la tercera es la vencida, llegó a la gobernación después de 2 derrotas. Ínterin había sido funcionario de las privatizaciones de Carlos Menem. Fue reelecto gobernador y también candidato a senador. Después intendente de Resistencia y candidato a diputado nacional. Y otra vez candidato a gobernador. Y perdió.

Con su última derrota todavía caliente se recicló como candidato a diputado provincial en las elecciones del reciente 11 de mayo. Perdió pero ganó una banca por 4 años. Y tras cartón se lanzó como candidato a senador hasta la próxima década. Y nuevamente perdió, pero no importa porque el perdedor también tiene una banca de premio.

Paradójicamente, al mayor y cada vez más grande titán de la historia política del Chaco ya se le anima cualquiera.

En 2023, cuando venía a fondo por la tetragobernación lo tumbó el radical Leandro Zdero, que ya tenía lo suyo, pero igual él consideraba un principiante inexperto, además de vago, inútil y mentiroso.

En mayo perdió contra el secretario de Legal y Técnica de Zdero: Julio Ferro, que hacía su debut como candidato. Ganó Ferro, a quien había ninguneado llamándolo “Forro”.

Y ahora, aunque en su épica denuncie haber sido aparateado, cayó contra un jovencito recién llegado a la política, que dio su primer discurso después de derrotarlo. En la boleta decía chiquito; Juan Cruz Godoy, o algo así.

Definitivamente, como él mismo recita en clave gauchesca, al gran Capitanich le tocó “aprender por el cuero” que “hasta el pelo más delgado hace su sombra en el suelo”.