El Ministerio de Desarrollo Humano, ex Desarrollo Social, es una de las áreas con menor actividad en los más de 2 meses de gestión que lleva el gobernador Leandro Zdero.
Al menos así lo refleja el sitio oficial del Gobierno del Chaco, que sólo se hizo eco de 3 actividades desde la asunción de las nuevas autoridades: en diciembre, declaraciones de la ministra Carina Botteri Disoff denunciando el mal estado de las dependencias del programa Mirame, de contención de personas en situación de calle durante el gobierno anterior; en enero, el anuncio de la habilitación de 2 números telefónicos extra para “reforzar” las líneas 102 y 108 destinadas a auxiliar a niños y adultos mayores, y lo último, en febrero: insinuaciones de la ministra sobre irregularidades en el manejo de la asistencia social entregada a las organizaciones lideradas por el piquetero Tito López.
La lógica indica que si hubo otras actividades oficiales de esa cartera y sus funcionarios en este tiempo, fueron aún menos relevantes, a tal punto de no merecer publicación siquiera en el portal oficial.
Así, alguien podría decir que Desarrollo Humano, un aspecto clave de la gestión, todavía no arranca, o directamente va a contramano de la urgencia de una provincia que antes de las últimas devaluaciones y el 120% de inflación acumulada en los últimos 6 meses ya tenía el 60% de su población bajo la línea de pobreza.