

El último fin de semana un caballo cuarto de milla, tordillo negro, de 2 años, llamado Alfonsín, fue robado de una vivienda del barrio Mujeres Argentinas, en Resistencia. Su propietaria denunció el robo e inició una búsqueda a través de las redes sociales.
Así recibió el último lunes información que la llevó a una zona de monte próxima a la rotonda de la avenida San Martín y la autovía de la ruta nacional 16, en Barranqueras, donde encontró la cabeza, patas y el cuero de su caballo: había sido faenado.
En el mismo lugar había restos de otros caballos, y vecinos de la zona aseguran que se trata de un “matadero de caballos robados” regenteado por 2 sujetos conocidos como “Gusano” y “Macu”.
Con la identidad de los sospechosos, la Policía la noche del miércoles detuvo al primero de ellos: Diego Sánchez, de 43 años, escondido en una vivienda del barrio Hormiguita, en Barranqueras. Y la mañana de este jueves a Macu: Raúl Leites, de 47.
Este último estaba escondido entre la maleza a la vera de la avenida San Martín, y asomó corriendo con intenciones de abordar un colectivo Chaco-Corrientes con destino a la vecina provincia.
La investigación continúa para dar con otras personas involucradas en la organización dedicada al robo y faena de caballos, y la comercialización de la carne, que se vendería en el Gran Resistencia como embutidos, milanesas o directamente “al corte”