
El último fin de semana un caballo cuarto de milla, pelaje tordillo negro, de 2 años, fue robado de una vivienda del barrio Mujeres Argentinas, en Resistencia.
Tras formalizar la denuncia, su propietaria inició una búsqueda personal a través de las redes sociales. Así recibió el último lunes información sobre la presencia del animal, llamado Alfonsín, en una zona de monte próxima a la rotonda de la avenida San Martín y la autovía de la ruta nacional 16, en Barranqueras.
Fue hasta ahí y encontró la cabeza, patas y el cuero de su caballo: había sido faenado. El hecho de que los cuatreros hayan llevado los cuartos evidencia que tenía previsto comercializar la carne.
En el mismo lugar había restos de otros caballos, y vecinos de la zona aseguran que se trata de un “matadero de caballos robados”.
Además de la locación, la mujer pudo saber quiénes serían los autores del robo, responsables del “matadero”.
Con datos de al menos 2 hombres involucrados, la Policía logró la noche de este miércoles detener a uno de ellos: Diego Sánchez, de 43 años, escondido en una vivienda del barrio Hormiguita, en Barranqueras.
Ahora buscan a su cómplice en el robo y la faena de Alfonsín, pero también a otras personas involucradas en la organización dedicada al robo y faena de caballos, y la comercialización de la carne, que se vendería en el Gran Resistencia como embutidos, milanesas o directamente “al corte”.