Alrededor de las 18 del sábado, el comisario Darío Caballero, jefe de la División Inteligencia Drogas, de la Dirección General de Consumos Problemáticos de la Policía del Chaco, circulaba a bordo de un patrullero junto al subcomisario Cristian Molina por la calle Juan Domingo Perón, de La Leonesa, y al girar en la calle 4 de Julio, se encontraron con una motocicleta de cross que circulaba en sentido contrario.
En ese momento el conductor del vehículo policial advierte que había ingresado a contramano y detuvo la marcha. Paralelamente, el motociclista comenzó a proferir insultos de todo tipo contra los policías, actitud que les pareció desmedida ya que, aunque iban en persecución de otro vehículo, habían girado a baja velocidad.
Caballero descendió para intentar apaciguar infructuosamente el ánimo del hombre que se mostraba cada vez más enardecido y cuando se acercó extrajo de una riñonera un puñal con el que lo atacó.
Al advertir la actitud del motociclista, el comisario dio un paso atrás evitando ser alcanzado por el arma que sólo lo rozó.
Por esto, Molina volvió a la camioneta y tomó la escopeta antitumulto, lo que llevó al hombre a ingresar a un local comercial, ubicado a pocos metros de ahí.
Alertada la Comisaría local sobre lo ocurrido, una comisión llegó al lugar y Caballero y Molina continuaron su camino para regresar minutos después.
Entonces el comerciante se había atrincherado en el local y, según la versión policial, blandía una pistola, presuntamente calibre 22. Finalmente fue detenido e identificado como Raúl Postillone, propietario de El Rey del Pollo.