
Un hombre de 23 años, domiciliado en el barrio Don Santiago, en la zona norte de Resistencia, denunció que el último martes, minutos después de las 23, circulaba por la ruta nacional 11, en inmediaciones de la rotonda de la ruta nacional 16, a bordo de una moto, cuando fue interceptado por un patrullero.
Uno de los policías le solicitó la documentación del rodado, que no tenía consigo, y tampoco la portaba el titular del mismo, que viajaba como acompañante.
Ante esta situación, el efectivo le impuso que, para continuar su camino, debía abonarle 20 mil pesos, o transferir la suma a una cuenta bancaria. Finalmente accedió a hacer un aporte que alcanzó los 8 mil pesos.
Con la información aportada por el enunciante, los investigadores de la División Delitos Informáticos, reunieron informes del sistema de navegación de los patrulleros para identificar el móvil señalado y al personal a bordo.
Esto, sumado al comprobante de transferencia, que permitió identificar a la titular cuyo domicilio coincidía con el de unos de los policías del patrullero denunciado: el cabo Matías Edgardo Gómez. La mujer resultó ser su pareja.
La suma de evidencias en una causa por “presuntas exacciones ilegales”, llevó al fiscal Francisco Asís de Obaldía Eyseric a detener al cabo Gómez, lo que se cumplió la tarde de este viernes en su lugar de trabajo, la base de la Patrulla Preventiva, sobre la ruta 16. También le fue secuestrado su teléfono celular. Ahora se cree que la investigación podría alcanzar a su pareja.







