La comisaría de Villa Río Bermejito fue escenario de un motín e intento de fuga de varios presos, lo que puso en alerta a toda la comunidad.
Alrededor de las 20 un grupo de presos encendió varios colchones en una celda mientras otros intentaban desmantelar el techo de uno de los baños para darse a la fuga.
Los guardias intentaron sofocar las llamas con extinguidores mientras aguardaban la llegada de los bomberos y trasladaban a los presos hacia otro sector.
El procedimiento se dio en medio de un clima de violencia por la resistencia de los reclusos y el alboroto que se había extendido a otras celdas.
Finalmente la situación pudo ser controlada con el arribo de efectivos de otras unidades como el 911 y la División Rural de Juan José Castelli.
Afuera se agolpaban familiares de los detenidos y movimientos sociales que reclamaban que abrieran las celdas ante el temor de que el fuego se extendiera.
El resultado fue de 4 presos con lesiones leves, que no demandaron hospitalización.
La protesta se había originado en el reclamo por las malas condiciones edilicias, la falta de agua y el hacinamiento.