Después de una temporada sin lluvias significativas en Presidencia Roque Sáenz Peña, según reportó la Municipalidad, 150 milímetros se precipitaron este martes desde la madrugada hasta las 7.
La intensa y copiosa lluvia puso a prueba el sistema de desagüe de la ciudad.
El inmenso volumen de agua acumulada en un breve lapso de tiempo saturó los canales y el escurrimiento por gravedad es más lento. Por eso fueron activadas todas las estaciones de bombeo que dinamizan el proceso.
La Secretaría de Servicios Públicos de la Municipalidad informó que todos los equipos están en servicio y funcionan a pleno las bombas de ruta nacional 16 y calle 68; de calle 33 y ruta nacional 95; del barrio Puerta del Sol; de La Salada; y las de los barrios Tiro Federal-Ginés Benítez, a lo que se sumó una bomba portátil en el barrio 713 Viviendas. El Servicio Meteorológico Nacional vaticina que las lluvias en la segunda ciudad de la provincia continuarán hasta la tarde de este martes, inclusive, y luego de una pausa podrían retornar la noche del miércoles.