Poniendo segunda en el año electoral, el Gobierno de Jorge Capitanich impartió la directiva de no darle lugar al intendente Bruno Cipolini en ningún evento oficial en Presidencia Roque Sáenz Peña, para evitar tener que retocar las fotos.
Pero él logró vulnerar el cerco haciéndose pasar por Jorge Rojas.
Así cautivó la atención de otro termaleño: el ministro de Planificación, Economía e Infraestructura: Santiago Pérez Pons que se abalanzó para pedirle una firma: “Tengo todos tus discos. Vos tendrías que ser el intendente, no Cipolini”, exclamó, según cuentan los testigos.
Pero los peronistas rencorosos tienen otra versión: atribuyen el entusiasmo demostrado a cierto “parentesco político”, genética adquirida como funcionario de Cambiemos, con María Eugenia Vidal y con el mismísimo Mauricio Macri.
Tan es así que muchos ya cantaron su voto por Bruno en un virtual duelo con Santiago por la intendencia de la Termal, porque “más vale radical conocido que macrista por conocer”.
Obviamente tiene mucho más asidero lo de Jorge Rojas.
Aaaa-ma-méeee y deja que yo teame hasta enlóoooo que ceeeer…
