Mientras se multiplican las críticas dentro y fuera de la fuerza por la falta de equipamiento y recursos humanos, la Policía del Chaco incorporó a su logística un carro de asalto.
La flamante unidad no es para cualquier conductor, se requiere destreza en el manejo en el sofisticado sistema de riendas que controla la dirección y el freno.
Mientras la División Rural reclama camionetas 4×4, en la capital provincial se conforman con mucho menos, eso sí: tracción integral en las 4 patas.
Es lo que hay. Hasta acá nos trajo la inflación. El propio jefe Ariel Acuña había advertido sobre las consecuencias del aumento del costo de los vehículos, neumáticos y repuestos.