Varios movimientos hubo este sábado en la causa por la desaparición y femicicio de Cecilia Strzyzowski. A primera hora se supo del despido de los abogados José Galassi y Alicia Medina, por la pérdida de confianza de la familia que los llamó “infiltrados”, ambos precandidstos a diputados por el Frente Chaqueño.
En segundo lugar asumió el abogado saenzpeñense Juan Arregín, acompañando a Carina Gómez, tía de Cecilia, que poco después renunció y asumió en su lugar Sergio Briend.
Los nuevos abogados de la querella adelantaron que los restos óseos hallados en los allanamientos serán enviados a Córdoba para profundizar las pericias.
Este sábado hubo nuevos procedimientos pero los resultados fueron negativos.
Otro de los aspectos claves de la investigación está vinculado al contenido de los teléfonos celulares secuestrados a los imputados y otros aportados por allegados a ellos y a Cecilia.
Un dato llamativo es que 10 de los integrantes de la familia Sena y su entorno hayan cambiado de aparato apenas horas después de la desaparición de Cecilia.
Los peritos creen que, a pesar de haber descartado los teléfonos, podrían recuperar buena parte de los archivos alojados en nubes. Sobre esto podría haber “novedades importantes el martes o miércoles”, dijo Briends.
Los dispositivos descartados también son objeto de búsqueda.
Mientras, corre el plazo para definir la situación procesal de los detenidos, Emerenciano Sena y Marcela Acuña, el hijo de ambos: César Sena, la pareja de colaboradores: Gustavo Obregón y Fabiana González, y la pareja de puesteros de la chanchería: Gustavo Melgarejo y Griselda Reinoso.
