La última semana se dio una serie de robos en escuelas de varios puntos de la provincia. Estos episodios que antes ocurrían durante las vacaciones, pasaron a los fines de semana, principalmente los largos, pero ahora son noticia todos los días.
En Resistencia, la Escuela de Educación Primaria 343, ubicada en la avenida Alberdi al 2200, sufrió el último domingo el segundo robo de la semana. Los delincuentes destruyeron 10 puertas, mobiliario y gabinetes de computadoras para llevarse los componentes.
“La educación es el hijo de la pavota, nos eligen solamente para vandalizar o para robar lo poco que se tiene en las escuelas porque saben que no hay nadie”, graficó el ministro de Educación: Aldo Lineras al admitir la grave situación.
Al respecto contó que junto a la ministra de Seguridad y Justicia: Gloria Zalazar, analizan medidas para reducir la vulnerabilidad de los edificios escolares frente a la delincuencia.
“Estamos trabajando en elegir cuáles son los puntos de conflicto y sumarlos a la red de monitoreo”, dijo, reconociendo que estas medidas no alcanzará a todas las escuelas sino a un número acotado de ellas.
“Tenemos cámaras y lo único que conseguimos es ver cómo nos robaron, no tiene sentido poner cámaras si no se actúa a tiempo”, dijo describiendo la ineficacia del monitoreo que proponen como solución y la falta de reacción policial.
Mientras, las autoridades escolares asignan al personal “turnos para cuidar la escuela”, corriendo un riesgo inútil teniendo en cuenta sus escasas posibilidades de defensa frente a delincuentes que actúan siempre en banda y generalmente armados.