

El último fin de semana un cabo primero de la Policía del Chaco fue detenido en una causa por “presuntas exacciones ilegales”, iniciada tras la denuncia de un hombre al que 2 efectivos a bordo de un patrullero le exigieron 20 mil pesos para evitar el secuestro de su moto.
El motociclista había sido interceptado en la ruta nacional 11, en inmediaciones de la rotonda de la ruta nacional 16. Como no tenía efectivo, le ofrecieron la facilidad de abonar vía transferencia.
Esto permitió que los investigadores de Ciberdelitos y Delitos Economicos rastrearan a través del registro de GPS el itinerario de los patrulleros en la zona el día del hecho, y así también la identidad de los policías abordo. Confirmado esto, se individualizó la cuenta de destino que resultó corresponder a la pareja de uno de los efectivos: el cabo primero Matías Edgardo Gómez.
Por esto, el fiscal Francisco Asís de Obaldía Eseric ordenó su detención.
La publicación de la noticia en los medios de comunicación y las redes, llevó a otros damnificados mediante el mismo modus operandi, a formalizar denuncias.
Una de ellas, por un hecho ocurrido el 29 de noviembre, agravó la situación del cabo Gómez.
A eso se sumó la denuncia de una mujer que le había prestado su moto a un amigo y cuando éste regresaba fue interceptado en la misma zona, en la colectora de la ruta 11, donde le exigieron el pago de 50 mil pesos bajo apercibimiento de secuestrarle la moto por falta de espejos retrovisores.
El hombre no contaba con dinero y la llamó gracias a que uno de los policías le ofreció la conexión de internet de su celular. Así, ella accedió a abonar 10 mil pesos, y envió el comprobante, para conservar el rodado.
A información aportada permitió identificar al efectivo de este caso: el cabo primero Nahuel Pablo Gómez, chofer del patrullero. Éste fue detenido la tarde del martes.
Ambos cabo primero Gómez fueron alojados en la comisaría de Puerto Vilelas.






