La Universidad Nacional del Chaco Austral emitió un comunicado en el que asegura que no es ajena a “la realidad que están viviendo hoy todas las Casas de Altos Estudios de la República Argentina, debido al veto total de la Ley de Financiamiento Universitario”, en relación a la decisión del presidente Javier Milei, que rechazó la ley que incrementaba el presupuesto de las universidades y recomponía los salarios del personal.
Además, apunta contra los argumentos de la Nación que exige la implementación de un sistema de auditorías para controlar el manejo financiero de las autoridades universitarias: “Desconoce cómo funciona constitucional y legalmente el sistema de control del sector público”, asevera.
La Uncaus adhiere a la visión del profesor de Derecho Constitucional y de Derechos Humanos de la UBA, Andrés Gil Domínguez, que expresó en Clarín que “tal como surge del artículo 85 de la Constitución argentina y de la ley de administración financiera y de los sistemas de control el sector público (ley 24.156), dicho sistema está conformado por el control interno y el control externo. Ambos buscan garantizar la eficiencia, legalidad y transparencia en la administración de los recursos del Estado”.
“En torno a las universidades nacionales, el art. 59 “bis” de la ley de educación superior (ley 24.521) lo define claramente: el control interno es realizado por los órganos de auditoría interna de cada universidad, cuyos miembros son designados por los Consejos Superiores, y el control externo es competencia directa e indelegable de la Auditoría General de la Nación, dependiente del Congreso de la Nación”, siguió.
“El Poder Ejecutivo Nacional no titulariza ninguna potestad de control interno sobre estas o de supervisión del control interno que las mismas realizan a través de sus unidades de auditoria; las universidades nacionales no deben rendirle ninguna factura a un funcionario de segunda línea, que ni siquiera ejerce funciones de control”, dice Gil Domínguez,
El catedrático precisó que el control, tal como está establecido, abarca aspectos patrimoniales, económicos, financieros y operativos, y no encuentra relación alguna entre las auditorías pretendidas por el Gobierno nacional y la asignación de recursos planteadas en la ley vetada por el Presidente.
Procesados y condenados en la Uncaus
La Uncaus tiene una particularidad que la diferencia de la situación de las otras universidades abordada de manera genérica por Gil Domínguez: su administración fue tachada de fraudulenta por la Justicia Federal en una causa en la que el ex rector Omar Judis, su hijo Enzo, directivos de la misma Universidad y de fundaciones y empresas vinculadas a la misma, terminaron condenados por el desvío de fondos.
Y ahora, el rector Germán Oestmann, que sucedió a Judis, buena parte del plantel directivo y de fundaciones creadas en el entorno universitario, están procesados en una causa similar, que para el fiscal federal Carlos Amad, constituye una asociación ilícita que perfeccionó el esquema de corrupción anterior. Días atrás solicitó la elevación de esta causa a juicio.