La Unión Tranviaria Automotor y la Cámara de Empresas de Transporte Automotor del Chaco no lograron un acuerdo al cabo de una semana de negociación y los choferes de colectivos amenazan con paralizar los servicios urbano e interurbano de pasajeros.
El gremio reclama equiparar los salarios de sus afiliados con los que perciben sus colegas del Área Metropolitana del Gran Buenos Aires. Pero los empresarios niegan esa posibilidad alegando que las tarifas son bajas y los subsidios que reciben del Estado insuficientes.
Ambos plantean como única alternativa que, ante la disolución del Fondo Compensador y el recorte de subsidios nacionales, sea el Gobierno provincial quien aporte los recursos necesarios para cubrir la diferencia salarial que ronda los 300 mil pesos por trabajador.
Por su parte, el Gobierno, a través del mismo gobernador Leandro Zdero, el ministro de Infraestructura: Hugo Domínguez, y el subsecretario de Transporte: Rodolfo Díaz, ya anunciaron que la Provincia no puede destinar más fondos que los que ya aporta para contener al menos en parte las tarifas, lo que se suma al financiamiento de las flotas completas, un compromiso heredado de la gestión anterior.
Pero, fundamentalmente, los funcionarios encuadran la cuestión en un conflicto del sector privado y remarcan que las diferencias que surjan entre los trabajadores y la patronal deben zanjarse en ese ámbito.
En este contexto, el secretario de la UTA: Raúl Abraham, ya adelantó que las medidas de fuerza comenzarán este lunes con un paro de 24 horas, y que la protesta irá recrudeciéndose hasta obtener una respuesta favorable a su reclamo.
No obstante, el paro no está confirmado y tanto el gremio como los empresarios dicen esperar “una llamada” del Gobierno.