El Tribunal Oral de Dolores integrado por María Claudia Castro, Christian Rabaia y Emiliano Lázzari, condenó a los 8 rugbiers por el asesinato de Fernando Báez Sosa, cometido el 18 de enero de 2020 en Villa Gesell.
Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Enzo Comelli, Matías Benicelli y Luciano Pertossi recibieron la pena de prisión perpetua por el delito de homicidio doblemente agravado por premeditación y alevosía en concurso real con lesiones leves.
En tanto, Ayrton Viollaz, Blas Cinalli y Lucas Pertossi fueron condenados a 15 años de cárcel como partícipes secundarios del mismo delito.
El tribunal también avaló la petición los fiscales Juan Manuel D’Avila y Gustavo García de iniciar un proceso contra Pedro Guarino y Tomás Colazo, los otros 2 rugbiers que integraban el grupo, imputados al principio pero absueltos rápidamente, que fueron convocados como testigos. Entienden que por su ubicación en la escena, debieron haber visto situaciones que negaron conocer en la audiencia.