La falta de insumos y medicamentos fue una constante durante la gestión de Jorge Capitanich, aunque él y los funcionarios de Salud Pública lo negaban insistente y enfáticamente.
Paradójicamente, las nuevas autoridades de la cartera sanitaria detectaron en los primeros días de gestión depósitos abandonados con insumos y medicamentos en desuso y en muchos casos arruinados o vencidos.
El primer hallazgo ocurrió a partir de una intimación de Correo Argentino para que Salud abonara la deuda por el alquiler de un depósito sobre la autovía de la ruta nacional 11 o, en su defecto, retirara los bienes acumulados en él.
El galpón estaba colmado de insumos arrumbados desde hacía bastante tiempo, lo que hizo que prácticamente la mitad de ellos terminaran inutilizados.
A raíz de esta situación, se inició un relevamiento en todas las áreas sanitarias y, como resultado, la directora y el subdirector del hospital Perrando: María Laura Lescano y Cristian Dellera, denunciaron que en la Farmacia había un depósito con medicamentos sin registrar, muchos de ellos vencidos o prontos a vencer.
Los funcionarios solicitaron información al personal, pero no obtuvieron explicaciones convincentes, por lo que el Poder Ejecutivo, ante la irregular situación, formalizó una denuncia penal.
Por eso, este lunes la fiscal de Investigación Penal 3: Rosana Soto, encabezó un allanamiento en el que se relevó el material depositado ahí, se adoptaron medidas para determinar origen y destino, las razonas por las que no hay registro y quiénes son los responsables de esta situación.