Exactamente en el segundo aniversario de su emocionante inauguración que llevó hasta las lágrimas al gobernador Jorge Capitanich, la célebre canilla de plástico de Charata apareció abandonada en un basural.
Al parecer alguien se desprendió desaprensivamente del emblemático adminículo elegido por Coqui como broche de oro para el anuncio de la llegada del agua del interminable Segundo Acueducto del Interior a La Perla del Oeste.
Transeuntes la hallaron desahuciada pero en aparentes buenas condiciones, prácticamente sin uso, por lo que se cree que en cualquier momento volverá al ruedo.
La reconocieron inmediatamente porque en su momento estuvo en todos los canales al convertirse en noticia nacional como figura central de la Fiesta del Agua, marcando un antes y un después en el sudoeste chaqueño.
En las redes sociales, los irónicos dicen que a Capitanich, en Charata, además de la boleta le cortaron el chorro.
