

Este jueves continuó la instancia de cesura en el juicio en el que el denominado Clan Sena fue declarado culpable del femicidio de Cecilia Strzyzowski: César Sena como autor, y sus padres: los dirigentes sociales Emerenciano Sena y Marcela Acuña, como partícipes primarios, lo que equivale a prisión perpetua para los 3.
También fueron declarados culpables sus colaboradores Gustavo Obregón y Fabiana Melgarejo, de encubrimiento agravado, y Gustavo Melgarejo, de encubrimiento simple, mientras Griselda Reynoso fue considerada no culpable. Los 2 últimos ya están en libertad.
En la primera jornada la defensa de César solicitó la nulidad del debate y, consecuentemente, del veredicto, por considerar que el jurado no fue imparcial por mostrarse permeable a las presiones políticas, sociales y periodísticas. Un planteo al que adhirieron todos los defensores.
Subsidiariamente, solicitaron sendas evaluaciones médicas para determinar el estado de salud de Emerenciano y Marcela, y una junta médica psiquiátrica para César. Esto en el marco de una estrategia para lograr la prisión domiciliaria para los primeros y el traslado de César a un instituto de salud mental. También se pidió examinar la salud de González.
Este jueves la jueza Dolly Fernández rechazó el pedido de nulidad por extemporáneo, y aunque accedió a solicitar los informes médicos de los declarados culpables, aclaró que el planteo excede a la cesura, instancias en la que sólo deben cuantificarse las penas. Y que cualquier acción para mejorar las condiciones de detención deberán intentarla en el tiempo de ejecución de pena.
En el mismo sentido que la jueza se habían expresado la fiscalía y las querellas particular y en representación del Estado la jornada anterior.
Excelentes personas y padres ejemplares
El resto de la jornada estuvo dedicado exclusivamente al relato de los “testigos de concepto” presentados por la abogada Elena Puente, defensora de Obregón y González, todos amigos o familiares de la pareja de estrechos colaboradores de la familia Sena.
Todos subrayaron que son excelentes personas y padres ejemplares, muy educados y respetuosos, muy trabajadores y que hacen hasta lo imposible por criar a sus hijos de la mejor manera e inculcarle valores.
Apuntaron a cuánta falta hace González en su casa, para atender a su hijo menor y a su madre discapacitada.
Empleados de los Sena con sueldo estatal
No obstante el contenido monotemático de los testimonios, algunos de los convocados aportaron notas disonantes al señalar que estaban “subordinados” a Emerenciano y Marcela, y que cumplían al pie de la letra los que ellos les ordenaban. El cuñado de Obregón, admitió el hecho imputado a éste: “Yo no hubiera hecho eso, hubiera actuado de otra manera”, dijo.
Otro de los datos destacados de algunos testimonios, es el carácter político de la relación de Obregón y González con los Sena y el “movimiento”. Reconocieron que eran empleados de los Sena, pero que el sueldo les pagaba el Estado, y que entre sus funciones tenían “hacer política”.






