

La medianoche del último domingo una familia de la zona rural de Cote Lai fue víctima de un violento robo tipo comando a mano de 3 encapuchados que se alzaron con más de 12 millones de pesos, 13 teléfonos celulares y una Toyota Hilux.
El golpe fue perpetrado al final de una jornada en la que las víctimas habían organizado una jineteada a la que habían asistido los delincuentes.
Al escapar con el botín, estos dejaron abandonada una camioneta Honda CRV que planeaban volver a buscar pero no pudieron hacerlo por la presencia policial.
En el inicio de la investigación, la Policía halló la Hilux abandonada en un camino vecinal a la altura del kilómetro 977 de la ruta nacional 11. Y se supo que la Honda CRV abandonada había sido robada en Buenos Aires.
En el rastreo de los teléfonos robados, uno de ellos fue hallado en Villa Río Negro, en Resistencia. El hombre que lo tenía en su poder dijo haberlo encontrado en la ruta entre Cote Lai y Colonia Baranda, y lo devolvió voluntariamente.
El sistema permitió localizar varios de los aparatos, y la pesquisa llevó a Sebastián “Tuli” Fernández Carrizo, un delincuente de frondoso prontuario involucrado en varios hechos de las mismas características, la mayoría de ellos en el interior provincial.






