Cementerio abandonado: el San Francisco Solano inundado y en ruinas

El mal estado y el abandono siguen siendo las principales características del cementerio San Francisco Solano | Norte

Este domingo, Día del Padre, como todos los años, el cementerio San Francisco Solano convocó a una gran cantidad de personas para recordar a padres fallecidos.

En esta oportunidad, a la ya conocida falta de mantenimiento del lugar, se sumaron las secuelas de la última lluvia, que anegó gran parte del predio, dejando tumbas completamente bajo agua.

La inundación vedó el acceso a vastos sectores, incluso dificultó el tránsito en los pasillos de los nichos, una de las zonas consideradas más consolidadas del cementerio. Este cuadro es consecuencia del suelo deprimido pero también de desagües obstruidos o directamente la falta de desagües.

El mal estado del cementerio no es una novedad, es una constante de todas las gestiones, pero la situación es cada vez más ruinosa.

A las notorias deficiencias de la infraestructura, se suma el colapso, con el osario común abarrotado desde hace décadas, y sin parcelas vacantes para nuevas inhumaciones.

Sólo promesas

En su momento, las intendencias de Aída Ayala y después la de Jorge Capitanich, se habían embarcado en sendos proyectos para una nueva necrópolis. Se hablaba de amplios campos tanto en la zona norte como en el sur de la capital, con capacidad incluso de cubrir la demanda de todo el área metropolitana, pero todo quedó en promesas.

Ni promesas

Después, la gestión de Gustavo Martínez abordó muy someramente la necesidad de un nuevo cementerio que remplace al colapsado San Francisco Solano, pero no hubo acciones concretas en ese sentido. Ahora es el turno de Roy Nikisch, que hasta el momento no dio señales al respecto.