El frente Corrientes de Expresión Renovada, que lidera el exintendente de Resistencia: Gustavo Martínez, ya anunció que emprende el camino a las elecciones legislativas del 11 de mayo con boleta propia. Ante la incertidumbre que impera en el Partido Justicialista, abonada por la ausencia del presidente del Consejo Provincial: el exgobernador Jorge Capitanich.
“Entendimos que este año era una oportunidad para que todos podamos deponer actitudes, bajarnos del caballo, buscar la forma de reconocer errores con humildad y unificar los cuatro frentes peronistas que fuimos a la elección en 2023”, dijo Martínez, entrevistado por Roberto Espinoza, en radio Independencia, al dar por caída esta posibilidad por la falta de actitud de la conducción partidaria.
En el mismo sentido recordó que la suma del Frente Chaqueño de Capitanich, su frente CER, el Frente Integrador del exvicegobernador Juan Carlos Bacileff Ivanoff, y el frente Todos Unidos, del exgobernador Domingo Peppo, alcanzó más del 50 por ciento de los votos, lo que hubiera significado un triunfo peronista en primera vuelta, pero que sin embargo el escrutinio terminó en una derrota ante el radical Leandro Zdero.
Y advirtió que todo indica que esta situación se repetirá porque “el partido y la actual conducción se cerraron a conformar una lista propia integrada exclusivamente por la línea interna de las autoridades partidarias”.
Para él, “hay que terminar con el modelo de dirigentes de privilegio, de beneficios, de la casta peronista, que hay y mucho, principalmente en los últimos años”.
“El peronismo tiene que volver a la militancia sana, honesta, transparente, en vez de alimentarle el ego a una persona y adularla para que se siente bien”, chantó, en obvia alusión al centralismo de Capitanich y su entorno. Y siguió: “En los últimos años nos llenamos de piqueteros y políticos yupis, y “aguante los pibes” y todas esas pelodudeces que nos llevaron a perder el gobierno a fragmentar el peronismo en 4 frentes con 160 candidatos a intendentes peronistas en la provincia”.
Y aunque metafóricamente, volvió a disparar contra Capitanich, endosándole la falta de voluntad para convocar a todos los sectores: “Cuando un equipo anda mal nadie culpa a los jugadores, a la hinchada, al pasapelotas, al aguatero, la gente pide que cambien el técnico porque sabe que la responsabilidad es suya”.
“Tenemos que ser serios y decir las cosas como son”, remató.
En el mismo tono se había expresado recientemente Peppo, que lamentó que la derrota no haya servido de escarmiento, para deponer posturas irreductibles, y graficó que “Capitanich carga la mochila de no poder entregarle el gobierno a otro peronista”.