“En 16 años agotaron al electorado chaqueño y la gente decidió dar vuelta la página”, dijo el intendente de Resistencia: el peronista Gustavo Martínez, candidato a gobernador por la Corriente de Expresión Renovada, refiriéndose a las 3 gestiones gubernamentales y otra como intendente, de Jorge Capitanich, que pretende otra reelección.
Y analizó que una muestra de eso es la “desesperación electoral del Gobernador que salió a repartir todo lo que tiene a mano y a prometer lo que no tiene, aunque todos saben que no va a cumplir. Todos los días anuncia un barrio Caraguatá, como el que prometió en las elecciones de 2015, cuando sorteó y entregó las llaves pero nunca construyó las casas”.
“No se banca que la gente le diga que no y por eso sale a repartir y prometer el oro y el moro”, disparó, y aconsejó: “Agarren todo, porque por más que afuera los aprieten, en el cuarto oscuro pueden votar con total libertad”.
Para él, Capitanich está “enviciado de poder” y “recurre a cualquier método para conservar ese poder o acumular más”, y comparó: “La adicción al poder es como cualquier otra, como la adicción al alcohol, las drogas o el juego, la desesperación lo lleva a hacer cualquier cosa”.
Paralelamente, como ya había expresado en el debate, aseguró que “Coqui ya se largó y ahora, por orgullo, no se puede echar atrás, y quiere ganar a cualquier precio, pero ya está cansado y en 2 años va a renunciar, estafando a la gente que todavía crea en él”.
Desde su perspectiva, el plan de Capitanich es “dejarle el poder a los chicos que vinieron de Buenos Aires, que son los que están gobernando hoy, y no les importa si los chaqueños mueren de hambre, no tienen trabajo o los matan en la calle”.
“Pero esto se terminó. La gente decidió un cambio, y aspiramos a que el domingo CER sea una propuesta de ese cambio”, dijo, y vaticinó que “en estas elecciones habrá sorpresas, grandes poderosos soberbios van a caer”.
