Capitanich niega su deuda con Cammesa: Dejamos las cuentas saneadas

El exgobernador Capitanich jura que dejó al día las cuentas de Secheep y que la crisis energética es un invento del gobierno de Leandro Zdero.

El exgobernaor Jorge Capitanich hizo otra aparición, esta vez para referirse a la situación energética que atraviesa la provincia y reiterar su rechazo a la toma de crédito solicitada por el gobernador Leandro Zdero para hacer frente a la emergencia en la materia.

“Endeudaron a la empresa Secheep con Cammesa por 23000 M de pesos cuando nosotros dejamos saneadas las cuentas”, dijo sobre las finanzas de la compañía provincial y la deuda con la proveedora mayorista.

Esto, a pesar de “una deuda de arrastre del tarifazo macrista que contó con la complicidad de Zdero en la Cámara de Diputados de la Provincia y de todo el bloque de Cambiemos por 3000 %”.

Resulta llamativa la insistencia de Capitanich en la cuestión a pesar de haber sido desmentido en cada intento, no sólo por sus detractores, sino por su propio partidario, el exgobernador Domingo Peppo.

Justamente durante la gestión de Peppo el Poder Ejecutivo requirió a la Legislatura la autorización para gestionar un préstamo destinado al pago de la deuda con Cammesa heredada en 2015 de la gestión de Capitanich.

El mismo Peppo remarcó en reiteradas oportunidades los alcances del acuerdo por la refinanciación de la deuda y aseguró haber dejado el plan de pago al día y al finalizar su mandato el dinero disponible para la última cuota de 2019, más acreencias para cancelar totalmente lo adeudado.

Sin embargo, su sucesor incumplió el acuerdo y la deuda comenzó a crecer. En principio, atribuyó a la caída de los ingresos por la merma de la actividad producto de la pandemia de Covid, pero la pandemia transcurrió y el ritmo de morosidad se sostuvo.

Según publicó oportunamente el propio gobierno de Capitanich en su sitio oficial, al 30 de septiembre de 2020 llevaba acumulada una deuda de 7.905 millones de pesos, y había logrado una condonación de 2.646 millones.

Pero el alivio duró poco, porque en diciembre de 2022, según publicó el mismo Gobierno, la deuda ya había superado los 33.000 millones de pesos. Ésta fue reprogramada en 96 cuotas cuyos vencimientos operarían recién a partir de 2024. El convenio fue firmado con la entonces Secretaria de Energía: Flavia Royón y promocionado por Capitanich y su ministro de Infraestructura, Economía y Planificación: el hoy diputado Santiago Pérez Pons, como un éxito, haciendo especial hincapié en la quita de un porcentaje de los intereses, pero sin mencionar el grueso de la deuda que por la reprogramación se había incrementado casi 1000%.

Para mantener vigente ese plan, la Provincia debía mantener al día sus boletas de luz con Cammesa, pero no lo hizo. Entonces, para asegurarse el pago, el ministro de Economía de la Nación, en aquel momento: Sergio Massa, llamó a Capitanich para “ratificar” el convenio, esta vez poniendo expresamente como garantía los débitos automáticos de la cuenta de fondos de coparticipación.

Apenas asumidas las nuevas autoridades gubernamentales y de Secheep, expusieron que el volumen de la deuda heredada del tercer gobierno de Capitanich ascendía a 310.000 millones de pesos. Nadie lo desmintió.

El propio gobierno de Capitanich admitía la acumulación permanente de deuda con Cammesa, aunque la atribuía a la pesada herencia.