Comenzó este miércoles la instancia de alegatos en el juicio por el asesinato de Fernando Báez Sosa contra los 8 rugbiers: Ayrton Viollaz; Enzo Comelli; Ciro, Lucas y Luciano Pertossi; Máximo Thomsen; Blas Cinalli y Matías Benicelli, ocurrido el 18 de enero de 2020 en Villa Gesell.
Tanto los integrantes del Ministerio Público Fiscal: Juan Dávila y Gustavo García, como los representantes del particular damnificado encabezado por el abogado Fernando Burlando, coincidieron en solicitar idéntica pena para los 8 acusados.
Para ellos, todos formaron parte del plan para matar a Fernando, y cumplieron un rol clave en la ejecución de ese plan, ya sea golpeándolo de todas las formas posibles o impidiendo violentamente la intervención de terceros que osaran defenderlo.
Según su versión, está probado que los 8 se propusieron asesinarlo, que lo golpearon en completo estado de indefensión y sólo se detuvieron cuando advirtieron que ya estaba muerto.
Por eso, solicitaron prisión perpetua para los 8 por “homicidio doblemente calificado por la participación de 2 o más personas y alevosía”, a lo que sumaron insistentemente la premeditación.
Falso testimonio
Los fiscales además pidieron imputar por falso testimonio a Juan Guarino y Nicolás Colazo, los 2 rugbiers que también integraban el grupo y en un principio fueron imputados pero terminaron absueltos al no haber evidencias de su participación en el hecho. Para ellos, fueron reticentes en sus respuestas para evitar comprometer a sus amigos.
