En medio de la ola de reclamos por el estado calamitoso de las rutas nacionales, y cuando se espera el anunció de un plan para recomponerlas, el Presidente de la Nación: Javier Milei, firmó el decreto 461/2025 para disolver la Dirección Nacional de Vialidad, “más conocida como Vialidad Nacional”, al decir del vocero presidencial Manuel Adorni, encargado del anuncio que comenzó con un video que resumía los hechos de corrupción en la obra pública por los que fuera condenada la expresidente Cristina Fernández.
También fueron disueltas la Comisión Nacional del Tránsito y la Seguridad Vial, y la Agencia Nacional de Seguridad Vial, que serán absorbidas por la Comisión Nacional de Regulación del Transporte que pasará a denominarse Agencia de Controles y Servicios Públicos del Transporte, que además será la autoridad de aplicación de concesiones viales.
Paralelamente, el Gobierno convocará a licitación la concesión de “9.120 kilómetros de rutas que tras décadas de despilfarro y corrupción se vieron degradadas”, adelantó Adorni.
Estas decisiones fueron tomadas con el argumento de terminar con la corrupción en la obra pública, según expresó el funcionario que sobre la denominada Causa Vialidad, remarcó los “sobreprecios para el contratista Lázaro Báez”, “contratos públicos amañados, abandono de obras, ampliación injustificada de plazos”, y dijo que “consta en la Justicia que hicieron una maniobra administrativa para inyectarle liquidez a Vialidad. Un instrumento para la maniobra ilegal destinada a mover recursos”.
“Es un acta de defunción a la corrupción de la Obra Pública y la firmó el presidente de la Nación”, remató.
