El expresidente de Perú: Alan García fue detenido la mañana de este miércoles, implicado en la causa internacional Odebrecht, en la que se investiga una serie de hechos de corrupción en la adjudicación de obras públicas.
Al advertir el despliegue policial y la inminencia de su detención, se disparó en la cabeza y fue trasladado en una camioneta particular hasta el hospital zonal.
Su abogado: Erasmo Reyna, dijo que “la detención es abusiva y arbitraria. García, indignado por la situación y seguro de su inocencia, sin ninguna responsabilidad en los actos de corrupción que se le endilgan, ocurrió el lamentable accidente”.
“Tomó la decisión de dispararse. Inmediatamente fue trasladado y operado”, precisó.
Mientras, algunos medios peruanos ya hablaban de su muerte y otros desconfiaban de la versión y abonaban la hipótesis de una maniobra para evitar ir a la cárcel.
Finalmente, a pocas horas de ser intervenido, murió.